Género
Desarrollo del tema
El contexto de discriminación y desigualdad social ha generado una marginación y negación de los derechos humanos de una serie de grupos sociales, en este tema ahondaremos específicamente la violencia de género que sufren las mujeres.
Para empezar el tema partamos por definir qué se entiende por género. De acuerdo con el glosario de género realizado por el Instituto Nacional de las Mujeres (INMUJERES) en el 2017 se entiende como:
“Aquella categoría que analiza cómo se definen, representan y simbolizan las diferencias sexuales en una determinada sociedad. Alude a las formas históricas y socioculturales en que mujeres y hombres construyen su identidad, interactúan y organizan sus funciones.”
Ahora bien ¿qué podemos entender por violencia de género? De acuerdo con el artículo 1º de la Declaración sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer realizada por la Organización de las Naciones Unidas en 1993 podemos entender a la violencia de género como:
“todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coaccón o la privación arbitraria de la libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.
En México, la violencia por razones de género ha existido desde tiempos inmemoriales y responde a una cultura predominantemente machista que se ha transmitido de manera acrítica de generación en generación, al bajo nivel educativo, a la exposición al maltrato infantil, a la vivencia de la violencia en en el seno familiar, al trastorno de personalidad antisocial, al consumo nocivo de alcohol y a las actitudes de aceptación de la violencia.
A partir de la década de los noventa, en México se comenzaron a recabar datos e información para visibilizar el contexto nacional sobre la violencia de género. A finales de 2019, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) reportó un porcentaje de 66.1% de mujeres mayores de 15 años (30.7 millones) que fueron violentadas de alguna manera (siendo el más alto índice, de 43.9%, ejercida por su esposo o pareja actual). En 2018 se registraron 3,752 defunciones por homicidio de mujeres, el más alto registrado en los últimos 29 años (1990-2018), lo que en promedio significa que fallecieron 10 mujeres diariamente por agresiones intencionales.
En el país el esfuerzo de diversas organizaciones de la sociedad civil mediante la realización de una serie de protestas públicas por abusos o muertes de mujeres y el despliegue de marchas para incentivar la denuncia y fortalecer la seguridad de las mujeres por parte del Estado y de la sociedad, han evidenciado la existencia de esta problemática y puesto presión a las instituciones públicas para la atención y respuesta a ella.
A su vez, este tipo de presiones sociales ha ayudado a mediatizar la problemática en redes sociales y medios de comunicación masiva, que por su parte han puesto presión en las instituciones públicas para la respuesta mediante acciones, como la tipificación del delito de feminicidio, la creación de leyes particulares en pro de la protección, garantía y defensa de los derechos humanos de las mujeres, el establecimiento de instituciones públicas a nivel nacional y local encargadas del seguimiento, atención y denuncia de los actos relativos a la violencia de género, entre otras.
No obstante, el proceso de generar condiciones de igualdad y equidad de género en el país sigue en proceso de adopción por la sociedad, una tarea y reto pendiente para las organizaciones estatales.