Clase digital 8. Enfoques para establecer y evaluar las innovaciones en el aprendizaje y la enseñanza

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Enfoques para establecer y evaluar las innovaciones en el aprendizaje y la enseñanza

Presentación del contenido

Hola, te doy la bienvenida a este espacio digital. Hasta este punto, ya contamos con los elementos conceptuales para entender las implicaciones de la innovación y cómo se manifiesta en el contexto educativo. En esta ocasión centraremos nuestra atención en la correlación que existe entre la innovación y evaluación, de esta forma se contribuye a la comprensión de qué implica evaluar las innovaciones en la enseñanza y aprendizaje. Para ello abordaremos los siguientes tópicos claves:

  • ¿Por qué la evaluación e innovación son necesarias?
  • ¿Qué es la innovación educativa?
  • ¿Qué es la evaluación educativa?
  • Evaluar las innovaciones en el aprendizaje y la enseñanza

Además, es importante tener presente que la evaluación de la innovación es un tema desafiante, ya que la innovación y la evaluación a menudo se perciben como fundamentalmente incompatibles, aunque no siempre conviven cómodamente, no se excluyen mutuamente. 

Esta clase digital busca contribuir al desarrollo de habilidades relacionadas con la evaluación crítica de innovaciones en el contexto educativo y con ello favorecer una mejor selección de estrategias de aprendizaje y enseñanza que promuevan la excelencia educativa en entornos educativos que integren las TIC.

Sin más que agregar, iniciamos con el desarrollo del tema.

Desarrollo del contenido

1. ¿Por qué la evaluación e innovación son necesarias?

La innovación se ha convertido en una de las palabras esenciales del contexto educativo. La línea de apertura del informe de la OCDE sobre entornos de aprendizaje innovadores (2013) lo dice de manera sucinta: “La innovación es un elemento clave de las sociedades y economías actuales, y eso incluye cómo aprendemos”.

La educación es considerada la base de sociedades prósperas y existe una preocupación respecto a que la educación tradicional no sea suficiente para preparar a los estudiantes para el futuro. Por tanto, la innovación es necesaria en la educación para satisfacer las necesidades de los estudiantes y las sociedades a las que sirven y para hacer frente a los diversos desafíos del mundo contemporáneo: “La innovación impulsa la influencia económica; la influencia económica apuntala el liderazgo global; y el liderazgo mundial requiere innovación para resolver los muchos problemas que enfrenta la humanidad en el próximo medio siglo. Si esto es correcto, y la innovación es la clave, entonces incluso los mejores sistemas educativos del mundo deben repensar radicalmente lo que ofrecen a cada estudiante” (Barber, Donnelly y Rizvi, 2012, p. 1). 

Imagen 1: La innovación y evaluación, de esta forma se contribuye a evaluar las innovaciones en la enseñanza y aprendizaje.

Mulgan (2007) defiende bien la innovación: “Un mundo feliz y estable puede tener poca necesidad de innovación. La innovación se convierte en un imperativo cuando los problemas empeoran, cuando los sistemas no funcionan o cuando las instituciones reflejan problemas pasados ​​en lugar de presentes” (p. 9). Debido a que las innovaciones importan, existe un interés considerable en cómo van las cosas, con una amplia gama de agendas en juego. Ciertamente, los financiadores y los responsables de la formulación de políticas están interesados ​​en el éxito de las iniciativas de innovación; aunque ven la innovación educativa como necesaria, a menudo quieren una sensación de seguridad sobre su inversión, por lo que el llamado a la innovación va acompañado de una demanda de responsabilidad. Bernholz (2011) recoge este sentimiento en el epígrafe de una publicación de la Fundación MacArthur: “Dame algo nuevo y demuéstrame que funciona” (p.1).

Si bien la evaluación puede brindar a los financiadores y a los encargados de formular políticas la confianza de que la innovación avanza de manera productiva y que su apoyo financiero sigue estando justificado, de esta forma la evaluación tiene un papel mucho más poderoso dentro de la innovación cuando se posiciona como una parte integral del proceso de innovación. 

La innovación exitosa puede estar cambiando rápidamente en respuesta a la incertidumbre y la complejidad, pero los cambios no son aleatorios. Los líderes de la innovación se basan en una combinación de creatividad y disciplina que les permite reaccionar con eficacia en condiciones diversas y cambiantes. Si bien existe un consenso cada vez mayor sobre la importancia y el valor de evaluar la innovación en el contexto educativo, existen muchos aspectos involucrados para convertir esta idea en una realidad productiva. Por ello resulta fundamental comprender las relaciones y diferencias entre la innovación y la evaluación. Ambos campos son en sí mismos complejos y en evolución, con una amplia gama de definiciones y representaciones, a menudo cuestionadas. Antes de considerar el nexo entre ellos, es importante considerar la complejidad de cada uno de ellos individualmente.

2. ¿Qué es la innovación educativa?

La innovación educativa abarca desde actividades de mejora escolar relativamente sencillas (pero no simples), a menudo en contextos difíciles, hasta enfoques transformadores que alteran la forma en que suceden la escolarización, la enseñanza y el aprendizaje. En algunos contextos, la idea de mejora escolar en sí misma puede considerarse innovadora debido a los puntos de partida y la naturaleza de los problemas. En otros, la innovación tiene como objetivo transformar totalmente los sistemas educativos y la naturaleza de la escolarización. Entre estos dos extremos se encuentra una amplia gama de modelos y paradigmas de innovación que unen teorías e iniciativas de múltiples formas. 

La mayoría de las innovaciones educativas se componen de múltiples actores, que trabajan en varios lugares y se guían por una amplia gama de teorías, algunas de las cuales han sido probadas en otros contextos. Las innovaciones en sí mismas generalmente se implementan de maneras impredecibles y cambian a lo largo del camino y todos aprenden a medida que avanzan.

Imagen 2: La innovación tiene como objetivo transformar totalmente los sistemas educativos.

La innovación en educación no es un fenómeno nuevo. La educación ha estado involucrada en un proceso cíclico de reforma durante varias décadas, prestando atención a la eficacia y la mejora de los centros escolares. Se ha centrado en gran medida en el cambio incremental evolutivo en las que el esfuerzo se concentra en tratar de hacer cambios dentro del contexto existente.

Los defensores de la innovación radical sugieren que es necesario ir más allá de la mejora y desafiar creencias arraigadas, con cambios fundamentales en la forma en que las personas piensan sobre la naturaleza de la enseñanza, el aprendizaje y el ritmo de las interacciones en los entornos de aprendizaje. No puede ser simplemente la aplicación lineal de ideas innovadoras a problemas educativos definidos y procesos existentes, sino que se ocupa del proceso de cambio social, personal, institucional y cultural, así como de los cambios en los procesos educativos.

Este sentimiento es reforzado por Hannon (2009) quien sostiene que: “los esfuerzos actuales de ‘reforma escolar’ y ‘mejora’ son totalmente inadecuados para la escala del desafío de preparar a los jóvenes para vivir bien y de manera sostenible en este nuevo siglo y que cualquier nuevo paradigma debe implicar ‘un cambio transformacional holístico hacia instituciones y procesos conectados, en un conjunto completo de niveles’”(p.1). Esta perspectiva significa que, para ser innovador, el cambio debe ir más allá de un solo proyecto o programa. Más bien abarca partes interconectadas de un sistema con el propósito de crear un cambio radical que reconozca la complejidad de los sistemas modernos: “La mayoría de los sistemas modernos son terriblemente complicados y desconcertantemente complejos y las innovaciones dentro de ellos probablemente sean un conjunto interconectado donde cada uno influye en el otro, con innovación tanto en las partes del sistema como en las formas en que se interconectan. La educación no es una excepción” (Mulgan & Leadbeater, 2013, p. 43). 

3. ¿Qué es la evaluación educativa?

La evaluación precisa de la recopilación y el análisis sistemáticos de los datos necesarios para tomar decisiones e identificar los efectos de las iniciativas educativas o, como lo describe la Asociación Estadounidense de Evaluación: “La evaluación implica evaluar las fortalezas y debilidades de los programas, las políticas, el personal, los productos y las organizaciones para mejorar su eficacia” (AEA, ND).

En la práctica, la evaluación en educación no es algo singular y siempre ha sido un dominio polémico y desafiante. Puede haber acuerdos sobre la necesidad de evaluar, pero también debates continuos en el campo sobre el propósito de la evaluación, los métodos que se utilizan, lo que cuenta como resultados valiosos, los modos de obtener mediciones y conceptos importantes, si la evaluación debe definirse por programa o por teoría, y la demás. Estos debates surgen, en parte, debido a las muchas razones diferentes para la evaluación. 

Imagen 3: La evaluación implica evaluar las fortalezas y debilidades de los programas.

Las evaluaciones están generalmente impulsadas por lo que la gente quiere y necesita saber. hecho por el que surgen diferentes intereses y perspectivas. La evaluación en educación se formuló inicialmente en torno a propósitos sumativos y formativos, las evaluaciones formativas se llevaron a cabo durante el desarrollo y la implementación de los programas para proporcionar una dirección sobre la mejor manera de lograr las metas o mejorar. En el caso de las evaluaciones sumativas se completaron una vez que los programas estuvieron bien establecidos para determinar hasta qué punto se alcanzaron las metas. Ambos modelos se basaron en la premisa de que los programas eran relativamente estáticos y luego podrían ampliarse repitiéndolos en otros lugares.

Los líderes de programas procuran estar interesados ​​en la evaluación formativa para la rendición de cuentas interna, y los responsables de la formulación de políticas y los financiadores desean una evaluación sumativa para la rendición de cuentas. Actualmente existen estándares para la evaluación de programas, por ejemplo, el realizado por el Comité Conjunto de Estándares para la Evaluación de la Educación en los EE. UU; este estándar tiene como objetivo brindar orientación a los evaluadores de programas, y proporciona una amplia base de expectativas para procedimientos de evaluación éticos y de alta calidad.

Estándares de evaluación de un programa
• Estándares de servicios públicos. Están destinados a aumentar la medida en que los interesados ​​del programa encontraron que los procesos y productos de evaluación son valiosos para satisfacer sus necesidades.
• Estándares de viabilidad. Están destinados a aumentar la eficacia de la evaluación y eficiencia.
• Estándares de propiedad. Apoyan lo que es legal, correcto y justo en las evaluaciones.
• Estándares de precisión. Están destinados a aumentar la confiabilidad y veracidad de las representaciones, proposiciones y hallazgos de la evaluación, especialmente aquellos que apoyan interpretaciones y juicios sobre la calidad.
• Estándares de responsabilidad de la evaluación. Fomentan la documentación adecuada de las evaluaciones y una perspectiva de metaevaluación centrada en la mejora y la responsabilidad de los procesos y productos de evaluación.
• Metaevaluación externa. Los patrocinadores de la evaluación del programa, los clientes, los evaluadores y otras partes interesadas deben fomentar la realización de metaevaluaciones externas utilizando estos y otros estándares aplicables.

Fuente: Comité Conjunto de Estándares para la Evaluación de la Educación, 2013

Por lo general, la evaluación educativa ha adoptado un enfoque lineal de descripción y uso de la definición del programa para determinar el diseño y la metodología de la evaluación. A continuación se brindan los momentos en los que generalmente se da el proceso de evaluación:

  • Los evaluadores establecen la gama de partes interesadas en el programa y en la evaluación y lo que esperan que ésta les proporcione. 
  • Involucran al equipo del programa para obtener claridad sobre la naturaleza de éste, su estructura, los supuestos subyacentes y la teoría de la acción que sustentan las expectativas de éxito del programa. 
  • Obtienen información sobre las metas y los resultados del programa y desarrollan indicadores y medidas para proporcionar evidencia relacionada con estos resultados. 
  • Determinan un diseño de evaluación que es consistente con las metas y propósitos del programa. 
  • Eligen y diseñan procedimientos de recopilación de datos afines a la teoría de la acción, recopilan los datos pertinentes, analizan los datos, extraen conclusiones y preparan un informe para el equipo del programa. 
  • Presentan los hallazgos y recomendaciones para que los utilicen las partes interesadas.

Este proceso es generalmente necesario pero no suficiente para evaluar la innovación. La innovación rara vez tiene la intención de producir programas replicables y el contexto que cambia rápidamente requiere enfoques que sean fluidos y receptivos. El campo de la evaluación es vasto y está creciendo, con una literatura sólida y prácticas en el terreno, que se están desarrollando para ir más allá de los modelos simples y proporcionar procesos que puedan integrarse en el desarrollo de la innovación. 

Los evaluadores e investigadores que estudian la evaluación han seguido ampliando y perfeccionando la naturaleza y la forma de los procesos de evaluación para adaptarse a las demandas cambiantes de tener evidencia disponible para decisiones importantes sobre políticas y prácticas, particularmente las que se consideran innovadoras. Han surgido nuevos métodos de recopilación y análisis de datos para ampliar el alcance y la amplitud de la evidencia que se puede considerar.

Dentro del campo de la innovación, los avances tecnológicos han ampliado la capacidad de abordar los problemas sociales y han creado cúmulos de datos cada vez más sofisticados que requieren experiencia evaluativa para comprender la evidencia y utilizarla dentro de los ámbitos de la innovación. El siguiente recuadro describe las tendencias que están surgiendo en la evaluación de la próxima generación.

Evaluación de próxima generación: aceptando la complejidad, la conectividad y el cambio
Las nuevas ideas han ampliado las formas en que las organizaciones piensan en mejorar la sociedad y se han abierto oportunidades adicionales de colaboración. Simultáneamente, la innovación tecnológica ha ampliado la capacidad del sector para comprender y abordar los problemas sociales. Existen tres tendencias principales que están impulsando la necesidad de que la evaluación evolucione:

1. Nuevas innovaciones filantrópicas: existe una creciente comprensión de que los modelos filantrópicos tradicionales han tenido un éxito limitado. Incluso las soluciones probadas se ven obligadas a experimentar cuando se enfrentan al desafío de escalar a nuevas poblaciones y geografías. Este crecimiento de la experimentación exige que la evaluación capture mejor el aprendizaje en entornos complejos.

2. Diferentes reglas de interacción: en los últimos años, el ritmo de los cambios se ha acelerado, aumentando el número de soluciones y enfoques que involucran a múltiples actores interdependientes. El entorno se ha vuelto más fluido y las soluciones menos predecibles. Ideas como el impacto colectivo han reforzado la necesidad de que las organizaciones trabajen juntas más allá de las fronteras, compartan información y aprovechen las lecciones que cada uno ha aprendido. A medida que evolucionan las reglas de interacción entre las organizaciones, los enfoques y métodos de evaluación deben adaptarse para proporcionar retroalimentación relevante, creíble y útil a las partes interesadas.

3. Proliferación de la infraestructura digital: la adopción de tecnología está generalizada y ahora está surgiendo una “infraestructura digital” (Bernholz, 2013). La explosión de las redes sociales y el uso de dispositivos portátiles han reducido rápidamente la duración del ciclo de retroalimentación. A medida que se crean y analizan más datos, la evaluación debe expandirse para permitir que las partes interesadas comprendan mejor la naturaleza de los problemas y maximicen el uso y la efectividad de los datos para resolver problemas.

Fuente: Gopalakrishnan, Preskill & Lu, 2013

Los teóricos recientes se han preocupado por crear enfoques que sean maleables y diseñados para considerar la evidencia en el contexto de la innovación. Vista de esta manera, la evaluación es en sí misma un proceso dinámico, flexible y específico del contexto, que involucra activamente a las diversas comunidades representadas en un proceso iterativo y cíclico para determinar la naturaleza de la evaluación.

4. Evaluar las innovaciones en el aprendizaje y la enseñanza

Una vez ya abordados los conceptos de innovación y evaluación educativa, nos centraremos en las bases que permiten la evaluación de las innovaciones en el aprendizaje y la enseñanza. En ese sentido, la educación superior, por ejemplo, ha tenido que flexibilizar las estructuras de sus cursos, adoptar la tecnología y abordar, entre otras cosas, el desarrollo de habilidades y competencias asociadas a la educación digital. Los profesores se han visto obligados a ser inventivos y apoyar el aprendizaje de sus estudiantes de formas diversas y cada vez más innovadoras. 

Imagen 4: La estrategia debe ser clara para evaluar qué tan buena es una innovación.

La presión para ser inventivos y probar las innovaciones en el contexto educativo es alta. Pero hay que tener cautela; no es aconsejable introducir una innovación cuando hay poca evidencia que sugiera su funcionamiento. Del mismo modo, no tiene sentido intentar implementar una innovación en un contexto para el que puede no ser adecuada. Es importante tener una estrategia clara para evaluar qué tan buena es una innovación, o qué tan apropiada podría ser en una situación dada. Por lo tanto, al momento de evaluar una innovación en el aprendizaje y la enseñanza conviene tomar en cuenta las siguientes cuestiones:

  • ¿Cuál fue el propósito de la innovación? 
  • ¿Qué desafío de enseñanza o aprendizaje estaba siendo abordado por esta innovación? 
  • ¿Cómo se implementó la innovación? 
  • ¿Cómo es esta iniciativa innovadora? 
  • ¿Cómo se basa esta innovación en la literatura (estado del arte) actual?
  • ¿Cuál fue la escala o el alcance de la innovación? 
  • ¿Quién participó? 
  • ¿Qué tipo de cambio implicó esto?
  • ¿Qué datos están disponibles para describir los efectos sobre el aprendizaje?
  • ¿Cuáles han sido los resultados, incluido el efecto dominó? 
  • ¿Cuál ha sido la dispersión de la innovación? 
  • ¿Cómo se sigue utilizando esta innovación? 
  • ¿Cómo podría adaptarse esta innovación para alcanzar diferentes resultados de aprendizaje y / o transferirse a otra institución? 

Como ya se ha analizado, la innovación educativa es un proceso de varias actividades donde las ideas se transforman en nuevos métodos, procesos o enfoques para promover la educación. En el proceso de la evaluación de la innovación, resulta fundamental la descripción detallada de la misma, para este propósito es posible apoyarse de los siguientes criterios que permitan documentar la potencial innovación y con ello facilitar su evaluación:

Descripción de la innovación

  • Describir la razón fundamental de la innovación ya sea en el ámbito del aprendizaje y/o enseñanza.
  • Enunciar los objetivos específicos de la innovación en términos mensurables.
  • Validar la evidencia proporcionada de que la innovación es apropiada para los objetivos específicos.
  • Describir la audiencia para la que está destinada la innovación: 
    • Señalar claramente lo que hacen las y los estudiantes (cuando aplique).
    • Señalar claramente lo que hacen las y los docentes (cuando aplique).
  • Describir claramente los recursos utilizados para desarrollar la innovación.

Fuente(s) de datos y plan de análisis

  • Enlistar las múltiples fuentes de datos evaluativos en el análisis de la innovación: 
    • Asegurar la relación con los objetivos específicos.
    • Validar que las fuentes de datos proporcionan perspectivas variadas sobre el éxito de la innovación.
  • Describir las herramientas de evaluación utilizadas:
    • Proporcionar datos precisos.
    • Asegurar que el análisis adecuado de los datos.

Evaluación de resultados 

  • Describir cuál es la calidad de la evidencia del aprendizaje como resultado de esta innovación.
  • Señalar cuál es la calidad de la evidencia proporcionada que demuestra el impacto de la intervención.
  • Describir cómo la innovación ayudó a las y los estudiantes a alcanzar los objetivos de aprendizaje y los resultados deseados.

Discusión 

Discusión General 

  • Incluir una justificación sólida de por qué se implementó la innovación.
  • Integrar una discusión significativa sobre por qué la innovación tiene éxito.

Practicidad / viabilidad / transferibilidad

  • Describir cómo este enfoque / material ha sido o podría ser implementado o adoptado por otros dentro del centro educativo.
  • Enunciar los recursos utilizados en la creación o implementación del proyecto.
  • Proporcionar evidencia de la sostenibilidad del proyecto (se requieren recursos excepcionales para implementar o continuar esta innovación). 
  • Argumentar cómo se puede implementar la innovación en otras organizaciones.

Importancia / Impacto

  • Describir cómo este enfoque / material ha beneficiado a la comunidad educativa.
  • Señalar cómo otros han construido o se basarán en esta innovación.

Conclusión

  • Argumentar por qué la iniciativa es innovadora en la educación universitaria.

Medir y evaluar la innovación en educación y comprender cómo funciona es fundamental para mejorar la calidad del sector educativo. El seguimiento sistemático de la evolución de las prácticas pedagógicas innovadoras puede aumentar la base de conocimientos sobre educación internacional. De ahí la necesidad de examinar cómo las prácticas están cambiando el aprendizaje y la enseñanza. Sin lugar a dudas, esto ayudaría a los responsables de la formulación de políticas a orientar mejor las intervenciones y los recursos, y a obtener comentarios rápidos sobre si las reformas cambian las prácticas educativas como se esperaba.

Conclusiones y énfasis de ideas clave

Hemos llegado al final de esta clase, en ella hicimos un análisis general por lo siguientes tópicos clave:

  • La innovación es un elemento clave de las sociedades y economías actuales, y eso incluye cómo aprendemos.
  • El pensamiento evaluativo es un componente necesario para una innovación exitosa e involucra más que medición y cuantificación.
  • Combinar evaluación con innovación requiere disciplina en la innovación y flexibilidad en la evaluación.
  • Medir y evaluar la innovación en educación y comprender cómo funciona es fundamental para mejorar la calidad del sector educativo. 

Vas muy bien, estamos cada vez más cerca de la recta final de esta experiencia de aprendizaje ¿Cómo te has sentido? Espero que de maravilla, no decaigas ya casi cumples con el objetivo.

Fuentes de información

  • OECD. (2016), Innovating Education and Educating for Innovation: The Power of Digital Technologies and Skills, OECD Publishing, Paris.
  • Earl, L. (2015). Evaluative thinking for successful educational innovation, OECD Education Working Papers.
  • AACP. (2022). Innovation in Teaching Award Requirements and Evaluation Criteria, American Association of Colleges of Pharmacy.