La UG en el contexto actual
Introducción
Es un gusto coincidir nuevamente contigo en esta experiencia de aprendizaje. En esta segunda clase, nos adentraremos al contexto en el cual se encuentra inmersa la Universidad de Guanajuato (UG) y en el que, por su naturaleza de Institución de Educación Superior, busca incidir favorablemente contribuyendo al desarrollo integral de las personas en la sociedad.
Esta exploración del contexto se efectuará en los distintos niveles: internacional, nacional y estatal; de modo que puedas comprender cuáles son los factores y las tendencias económicas, sociales, culturales y políticas que podrían incidir en los estados futuros donde la UG busca contribuir, así como las estrategias que efectúa para aproximarse al ideal que se ha fijado institucionalmente.
Ahora que hemos hablado un poco acerca del tema, continuemos con nuestro trabajo.
Desarrollo del tema
El contexto internacional
Agenda de Desarrollo Sostenible
Uno de los marcos generales a nivel internacional es la Agenda de Desarrollo Sostenible, aprobada en 2015 por más de 150 líderes mundiales. En ella, se incluyen 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y 169 metas que forman parte del plan de acción que tiene por objetivo para 2030 disminuir la pobreza, luchar contra la desigualdad y la injusticia, y hacer frente al cambio climático sin que nadie quede rezagado. De entre los 17 ODS, el 4º se refiere al ámbito educativo y es de observancia obligatoria para la Universidad y su Plan de Desarrollo: Educación de calidad, que a la letra dice “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos”. La educación superior está referida de manera específica en la meta 4.3 “De aquí a 2030, asegurar el acceso igualitario de todos los hombres y las mujeres a una formación técnica, profesional y superior de calidad, incluida la enseñanza universitaria.”
Adicionalmente, de la Agenda se desprende un objetivo que impacta de manera indirecta en el ámbito educativo: el ODS 9 “Industria, Innovación e infraestructuras”, específicamente el 9c “Aumentar significativamente el acceso a la tecnología de la información y las comunicaciones y esforzarse por proporcionar acceso universal y asequible a Internet en los países menos adelantados de aquí a 2020”. ¿Por qué impacta en el ámbito educativo, específicamente el de la educación superior? Pues porque las TIC han sido adoptadas como una de las alternativas para lograr su carácter universal, mediante la ampliación de la cobertura con la atención a la población con deseos de estudiar, pero sin posibilidades de hacerlo en formatos presenciales o bajo el perfil de un estudiante de tiempo completo, a partir de que la UNESCO (1988) las percibe como una vía para “salvar las distancias y establecer sistemas de educación de alta calidad […]» con la intención de favorecer el progreso social, económico y la democratización.
La Agenda de Desarrollo Sostenible se ha retomado en la conformación de los programas de desarrollo de los 193 Estados que lo adoptaron, entre ellos México, quienes se han comprometido a llevar a cabo lo necesario para su implementación mediante alianzas centradas sobre todo en las necesidades de las personas más precarizadas y vulnerables. Así pues, alineado a la Agenda, dos de los objetivos planteados en el Plan Nacional de Desarrollo de México 2019-2024 inciden en el ODS 4 y uno en el ODS 9, de esta manera se busca ampliar la cobertura de la educación, dando un impulso sin precedentes, al menos recientemente, a la educación superior, con su recién adquirido carácter obligatorio.
La coyuntura de la pandemia
La pandemia del SARS-CoV-2 aceleró la transformación digital, definida como “la rapidez con que se generan los desafíos de la globalización, los avances tecnológicos y los cambios que estos detonan en los ámbitos social, político y económico». Esto se ha extendido hasta el ámbito educativo, donde se ha observado cómo la tecnología y la educación se han convertido en un binomio inseparable. Si antes las TIC tenían alguna presencia en los procesos educativos y se les consideraba la única manera de ampliar en poco tiempo el acceso al conocimiento, con el COVID-19, ante la necesidad de dar continuidad a las clases, se convirtieron en unos de los pocos canales para hacerlo. De tener tiempo y recursos para eventualmente incorporar las TIC a la educación, devino en la única alternativa (en muchos casos) para evitar el rezago de las y los estudiantes (Trejo-Quintana, 2020).
La aceleración de la transformación digital en la educación conlleva grandes implicaciones para una era postpandémica. Para las instituciones educativas y los gobiernos, se ha hecho patente y urgente que deben (Trejo-Quintana, 2020):
Con la pandemia se puso en evidencia que las prácticas de la educación a distancia o educación virtual no son las mismas que las de la educación presencial “La escuela física no se reemplaza automáticamente con la escuela a distancia, porque la didáctica no se reduce a la tecnología, ni la pedagogía a usar internet. Son dos modalidades con lógicas y funcionamientos propios y eso siempre debe considerarse» (Trejo-Quintana, 2020: 126).
Así pues, la pandemia supuso un llamado de atención a las instituciones para resolver aquello que habían identificado en el pasado, pero que no consideraron prioritario atender, por lo que el reto al que deben enfrentarse es aún mayor: deben alcanzar las tendencias actuales, las cuales además exigen un posicionamiento distinto de las maneras de hacer las cosas; un ejemplo de ello es el concepto de Universidad del futuro, visión a la que deben apuntar para mantenerse vigentes. Es importante señalar que la transformación digital que se promueve no solo incluye a los procesos de enseñanza-aprendizaje, sino a los procesos académicos-administrativos de las universidades en general, a fin de asegurar mejores experiencias de las y los estudiantes y su comunidad universitaria.
La Universidad del Futuro
La transformación digital en marcha, los inventos tecnológicos y la disponibilidad masiva de datos marca la cuarta revolución industrial, dando nacimiento al concepto de Sociedad 5.0, en la que se busca abordar con mayor eficacia los distintos retos sociales. En ella se crearán nuevos valores y servicios para hacer más cómoda y sostenible la vida de las personas. Este concepto se está adaptando e implementando en Japón, donde se propone una sociedad que comparte sabiduría y fortalece la cooperación entre la industria, la academia y el gobierno para crear una nueva sociedad centrada en el ser humano y donde la tecnología juega un papel importante. En otras palabras, la Sociedad 5.0 que visualizan las autoridades japonesas apunta a la integración del hombre con la máquina a través de tecnologías avanzadas en busca de una mejor calidad de vida y bienestar.
Esta sociedad está alineada a lo establecido por la ONU en la Agenda de Desarrollo Sostenible; de ella, se vuelve esencial la promoción de la alianza global entre los gobiernos de todas las naciones para resolver las problemáticas de las sociedades. En este escenario, la Universidad del futuro funcionaría de manera adecuada. De acuerdo con Davey et al. (2018: 6) una universidad del futuro ideal debe alinearse con la comunidad empresarial a través de cadenas de suministro de innovación mientras satisface las necesidades de talento de los empleadores. Al mismo tiempo, también es importante que satisfaga las demandas de la comunidad regional a través de su impacto social (Panizzon y Pinto, 2020: 411-412).
Las universidades del futuro se deben alinear con los requerimientos de la Sociedad 5.0, por ejemplo, en Japón se ha determinado centrarse en las fortalezas humanas en cuanto a la inteligencia artificial y ciencia de datos, además de mejorar la educación en artes liberales para que los estudiantes estén preparados para la disrupción tecnológica. En este sentido, se están considerando dos cambios en el sistema educativo de Japón: uno es la progresión de grado más flexible, que ofrece clases de apoyo para garantizar la comprensión de las y los estudiantes estudiantes y evitar que pierdan un año académico completo debido a que reprobaron un solo curso; de esta manera, el estudiante avanzará al siguiente grado mientras aprende el curso que le faltó. El otro es eliminar las barreras existentes entre materias y disciplinas para sacarle el máximo partido a la tecnología (Panizzon y Pinto, 2020: 413): este es el futuro al que deben apuntar y al que se dirigen las instituciones de educación superior.
El contexto nacional
Ley General de Educación Superior
Otro referente de gran relevancia para la visión de la Universidad de Guanajuato es lo realizado en México en materia legislativa sobre la educación. En diciembre de 2020, se aprobó por la Cámara de Diputados la Ley General de Educación Superior (LGES) y se publicó en el Diario Oficial de la Federación en abril del 2021. Esta ley no había sido reformada desde 1978, por lo que se busca modernizar más de 10 artículos, así como cumplir a la reforma hecha el artículo tercero constitucional en 2019, donde se le otorgó a la educación superior el carácter de obligatoria, gratuita y se declaró que el Estado será quien la imparta y garantice, sin afectar la autonomía de las instituciones de educación superior.
La actualización de la legislación de la educación superior deriva de la necesidad de responder a las condiciones, los cambios y los grandes retos a los que se enfrenta el país y las instituciones con el desarrollo social y económico debido, la competencia del exterior y la constante evolución del sector laboral profesional al cual los universitarios ingresan. También con el menester de vincularse con el nivel de desempleo, los bajos salarios, la pobreza y la desigualdad, a fin de mejorar las condiciones de vida de las personas.
Así pues la LGES toma en su poder las problemáticas de la educación superior y las tendencias globales en torno a ella a fin de generar una vía común para las instituciones universitarias y, por ende, para el rumbo del país. En este sentido, puede decirse que la LGES se constituye como un marco de referencia donde se encuentran los criterios orientadores que ayudan a reconocer qué es lo que se espera de la educación superior. Por ejemplo, indica que la educación superior fomentará el desarrollo humano integral de las y los estudiantes en la construcción de saberes, entre ellos el pensamiento crítico, la interculturalidad, la resolución de problemas, la responsabilidad ciudadana, las relaciones sociales, el respeto y cuidado al medio ambiente, las habilidades digitales y uso responsables de las tecnologías, el desarrollo de habilidades socioemocionales, etcétera.
La transformación digital de la educación en México
La ANUIES publica el Plan de Desarrollo Institucional Visión 2030 (PDI V2030), en el que se establece la visión y las líneas de acción que permitan alcanzarla, guiando a las IES hacia un mismo objetivo en un entorno que describen como “turbulento”. Esta turbulencia reside en la rapidez con que se generan los desafíos de la globalización, los avances tecnológicos, la transformación de los ámbitos social, político y económico, la universalización y los cambios en la educación superior que inciden tanto a nivel regional como internacional.
Para dar respuesta a un entorno tan complejo, se vuelve esencial hacer disrupciones en los modelos educativos, donde, entre otras cosas, se acelera la conversión de las TIC a las Tecnologías para el Aprendizaje y Conocimiento (TAC) tanto en la presencialidad como en las modalidades abiertas y a distancia. Al mismo tiempo, el PDI V2030 tiene como intención dirigir las acciones para contribuir al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU, que incluye como meta el aumento de forma significativa al acceso a la tecnología de la información y comunicación, así como de la investigación científica (ONU cit. por ANUIES, 2016) rumbo al fomento de la innovación.
En armonía con las tendencias globales, se desarrolla la Agenda Digital Educativa (ADE), la cual tiene fundamentada su creación en el artículo tercero y en la Ley General de Educación. En ella, se impulsa la transformación digital de la educación, atendiendo a la importancia de las tecnologías en la vida cotidiana. La ADE constituye un instrumento que permita integrar y planificar las políticas públicas relacionadas con el uso de las Tecnologías de la información, comunicación, conocimiento y aprendizaje digitales (TICCAD) en el Sistema Educativo Nacional.
Entre sus objetivos se encuentra promover la equidad, el acceso, la calidad y la excelencia de la educación gracias al uso educativo de las TICCAD, fortalecer la infraestructura y garantizar la adquisición de habilidades, saberes y competencias digitales demandadas por la sociedad del siglo XXI. Conforme a la Nueva Escuela Mexicana, no establece de manera inamovible nuevos conceptos y contenidos educativos; es decir, es un marco de acción que no impone dogmas pedagógicos, sino que propone soluciones específicas a problemas de los procesos de enseñanza y de aprendizaje concretos en el aula (SEP, 2020).
En la ADE se emplea el término educación digital, en la que surgen iniciativas innovadoras, como la educación en distintas modalidades, en la que se incorporan nuevas herramientas, nuevos enfoques y metodologías educativas, en la que se requieren nuevas profesiones y perfiles docentes, donde se diversifican los escenarios de enseñanza y aprendizaje, y los conocimientos y materias de estudio.
La ANUIES
La Asociación Nacional de Universidades e Instituciones de Educación Superior (ANUIES) es una organización no gubernamental que agrupa a 191 instituciones públicas y particulares. Desde su creación en 1950 ha fortalecido la educación superior, por ello, en coordinación con las autoridades federales ha llevado a cabo proyectos de gran relevancia para ampliar la cobertura, profesionalizar y certificar al personal académico, impulsar la movilidad nacional e internacional, entre otros.
En 2018, esta asociación publicó el documento Visión y acción 2030. Propuesta de la ANUIES para renovar la educación superior en México, con el objetivo de seguir atendiendo a los “rezagos históricos” y actualizarse con base en los referentes internacionales, ante los cuales se observa un atraso. El objetivo principal del documento es constituir una propuesta para la mejora estructural de la educación superior, lo que permitirá continuar con la tradición de diseñar y concertar nuevas políticas públicas con las autoridades educativas, federales y estatales, con diversos actores políticas y con la sociedad en general (ANUIES, 2018: 14).
Así pues, la ANUIES busca proveer de elementos necesarios a las autoridades educativas encargadas del diseño y la instrumentación de políticas públicas para revisar críticamente sus acciones y su forma de organización y, a partir de ahí, renovar sus prácticas y acordar una nueva arquitectura institucional, a fin de lograr la sinergia y la complementariedad del trabajo de todas las IES del país. Sin embargo, ahora que el gobierno federal ha proclamado a la educación superior como obligatoria y ha adquirido, por tanto, el deber de promoverla y por ello generar las políticas públicas necesarias para ello, ¿cuál será el papel de la ANUIES?
Te invito a leer de manera crítica y reflexiva el artículo “Anuies enfrenta dilema de subsistencia por nueva instancia educativa: expertos” del periódico La Jornada.
El contexto estatal e institucional
A nivel estatal, se tienen 3 documentos que son referencias esenciales para el quehacer de la Universidad de Guanajuato:
El primero de ellos es el Plan Estatal de Desarrollo Guanajuato 2040: Construyendo el Futuro, este es un instrumento de planeación de largo alcance que se alineó al Plan Nacional de Desarrollo y Planes Sectoriales 2012-2018, así como a los 17 ODS de la ONU. En este instrumento de planeación se considera una cobertura del 34.16% al año 2040 para la educación superior en el Estado de Guanajuato, si se continua creciendo a la misma velocidad, o del 49.56% en un escenario optimista.
El siguiente es el Programa de Gobierno 2018-2024 para el Estado de Guanajuato. Este se centra en seis ejes de desarrollo, el que más interesa es el «Eje de Educación de Calidad», el cual establece que “Vamos a transformar la educación integral en Guanajuato, con competencias, valores, cultura y deporte, ofreciendo servicios educativos de calidad para todas las personas, incrementando significativamente la escolaridad, el número de egresados de educación media superior y superior, así como fomentando y fortaleciendo la cultura científica y tecnológica. La oferta formativa en el estado será un apoyo a la mentefactura y a la industria 4.0”. El programa contempla alcanzar al final del sexenio coberturas del 100% y 45% en los niveles medio superior y superior, respectivamente, tomando como base valores de 77.8% y 33.4%, respectivamente, en 2019.
Finalmente, está la Ley de Educación para el Estado de Guanajuato que regula la educación que imparte el estado, los municipios y los organismos descentralizados del sector educativo y los particulares, de conformidad con la legislación federal y estatal. En referencia a la educación superior, las políticas se basarán en el principio de equidad, tendrán como objetivo disminuir las brechas de cobertura educativa y deserción escolar. De igual forma, indica que la gratuidad de la educación superior se implementará de manera gradual en los términos que establezca la ley de la materia y conforme a la suficiencia presupuestal, procurando la inclusión de los pueblos indígenas y los grupos sociales más desfavorecidos. Asimismo, en su capítulo VIII incluye a la tecnología educativa, indicando que se procurará utilizarla con la finalidad de fortalecer los modelos pedagógicos de enseñanza-aprendizaje, la innovación educativa, así como el desarrollo de habilidades y saberes digitales.
La UG ante la pandemia
La propagación del COVID-19 llevó a que se tomara la determinación de suspender todas las actividades académicas y administrativas de la UG a partir del 17 de marzo de 2020, esperando reanudarlas el 20 de abril de ese mismo año, sin embargo, la incertidumbre se posicionó como una característica inherente a una nueva realidad, ya que cada vez más se iba desvaneciendo la certeza del regreso a la presencialidad.
Ante esta situación, las tecnologías de la información y comunicación fueron la herramienta para mediar la enseñanza y el aprendizaje. Se emplearon las plataformas dispuestas para la comunidad universitaria, como Microsoft Teams y la plataforma del Campus Digital. Si bien la pandemia por el COVID-19 supuso una serie de retos y desafíos, de acuerdo con el Informe anual de actividad 2020-2021, la matrícula no se vio afectada, habiendo incluso un incremento promedio de 0.8 % con relación al año anterior.
El impulso que la pandemia le dio a la transformación digital del aprendizaje deriva, por ejemplo, en el anuncio del Programa de Optimización y Operatividad Estratégica para la Superación Académica (PROOESA) en octubre de 2020, programa orientado al desarrollo académico mediante estrategias innovadoras y la optimización de sus recursos, y con el cual se crea el Campus Digital; un quinto campus universitario donde converge toda la oferta educativa en línea de la Universidad, tanto del nivel superior como del nivel medio superior.
Conclusión
Has concluido con el contenido de la segunda clase del curso. Este trayecto formativo apenas va comenzando, no pierdas tu entusiasmo. Es importante que de esta clase recuerdes los siguientes aspectos:
- La observancia de los contextos internacional, nacional, estatal e institucional son esenciales para comprender las acciones y estrategias planteadas en el plan de desarrollo de una organización o institución, en este caso, de la Universidad de Guanajuato.
- La Agenda de Desarrollo Sostenible es el principal referente internacional, ya que considera prácticamente todos los factores que inciden en una sociedad y toma en cuenta cómo cada uno incide en el otro.
- La Ley General de Educación Superior y la transformación digital en la educación constituyen algunos de los referentes nacionales que impactan en la construcción de los planes de desarrollo.
- La pandemia por el COVID-19 y las acciones llevadas a cabo por la UG ante ella forman parte esencial de la estrategias planteadas por la institución para alcanzar su visión e ideales.
Para finalizar, realiza la actividad requerida. En tus manos tienes tu educación, ¡sigue adelante!
Fuentes de información
- Fernández F., E. (2017). Una mirada a los desafíos de la educación superior en México. En Innovación educativa, 17 (74), 183-207 pp. http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1665-26732017000200183
- Grajek, S. (2020). How Colleges and Universities Are Driving to Digital Transformation Today. En EDUCAUSE. https://er.educause.edu/articles/2020/1/how-colleges-and-universities-are-driving-to-digital-transformation-today
- Iniciativa con proyecto de decreto por el que se expide la ley general de educación superior, Cámara de Diputados LXIV Legislatura, Sesión del 9 de septiembre. (2020). https://infosen.senado.gob.mx/sgsp/gaceta/64/3/2020-09-09-1/assets/documentos/Iniciativa_Diversos_Gpos_Ley_Educacion_Superior_Act.pdf
- Muñoz M., R. J. & Tovar T., S. R. (s. f.) Programa UG Contigo. https://nodo.ugto.mx/sume/ugcontigo/
- Observatorio Regional de Planificación para el Desarrollo de América Latina y el Caribe. (s. f.) Plan Nacional de Desarrollo de México 2019-2024. https://observatorioplanificacion.cepal.org/es/planes/plan-nacional-de-desarrollo-de-mexico-2019-2024
- ONU. (2015). 70/1. Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible [Resolución aprobada por la Asamblea General el 25 de septiembre de 2015]. https://www.un.org/ga/search/view_doc.asp?symbol=A/RES/70/1&Lang=S
- Panizzon, M., & Pinto B., P. F. (2020). Critical Success Factors of the University of the Future in a Society 5.0: a Maturity Model. En SAGE, 12 (4), 410-426 pp. https://journals.sagepub.com/doi/pdf/10.1177/1946756720976711
- Salazar, L. (2021). Avanza obligatoriedad y gratuidad en la educación superior en México. En Puntou. https://puntou.uanl.mx/noti-u/avanza-obligatoriedad-y-gratuidad-de-la-educacion-superior-en-mexico/ Trejo-Quintana, J. (2020). La falta de acceso y aprovechamiento de los medios y las tecnologías: dos deudas de la educación en México. En Educación y pandemia. Una visión académica. Ciudad de México: IISUE, 122-129 pp. https://www.iisue.unam.mx/nosotros/covid/educacion-y-pandemia