Diferencias entre competencia digital y alfabetización digital
Los distintos autores e investigadores de estos términos, al intentar acuñar nuevos conceptos, han proporcionado múltiples definiciones: algunas son similares, otras bastante diferenciadas y muchas son redundantes. Se observa que la competencia digital y la alfabetización digital están estrechamente relacionadas pero no son idénticas. A continuación, se proporciona un resumen de los matices y sutilezas identificados en la literatura que son útiles para distinguir entre competencia digital y alfabetización digital.
Competencia digital | Alfabetización digital |
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Un requisito de empleabilidad de la era digital. | Conceptualizaciones del paradigma cambiante del aprendizaje en la era digital. |
Una connotación de «habilidades» que implica competencia con algunas de las aplicaciones informáticas actuales, incluido el procesamiento de textos y el correo electrónico, etc. | Enfoques didácticos para el aprendizaje y la comunicación. |
Conjunto de habilidades necesarias para aplicar las tecnologías digitales al trabajo, el ocio y la educación. | Conjunto de entendimientos necesarios en la era digital para comprender, producir y negociar significados en una cultura formada por imágenes, palabras y sonidos poderosos. |
Habilidades para comunicarse con otros y abordar una amplia gama de textos en todos los medios. | Una combinación de habilidades técnico-procedimentales, cognitivas y emocionales-sociales. |
Una gama de capacidades (conocimientos, habilidades y competencias) que cubren tres categorías principales: habilidades de los profesionales de las TIC, habilidades de usuario de TIC y habilidades de comercio electrónico. | Procesos de conciencia, confianza, evaluación, reflexión, adaptabilidad y voluntad para afrontar los retos de la era digital. |
Capacidad demostrada para aplicar conocimientos, habilidades y actitudes para lograr resultados observables; desempeño medible a través de rúbricas. | Capacidad para comprender y utilizar información en múltiples formatos de una amplia gama de fuentes cuando se presenta a través de computadoras. |
Uso seguro y crítico de la tecnología de la sociedad de la información (TSI) para el trabajo, el ocio y la comunicación. | Habilidades cognitivas, motoras, sociológicas y emocionales complejas que los usuarios necesitan para funcionar eficazmente en entornos digitales. |
Respaldado por habilidades básicas en TIC: el uso de computadoras para recuperar, evaluar, almacenar, producir, presentar e intercambiar información y para comunicarse y participar en redes colaborativas a través de internet. | Conciencia, actitud y habilidades subyacentes necesarias para utilizar adecuadamente las herramientas digitales y reflexionar sobre este proceso. |
Aunque el concepto alfabetización digital parece ser el más utilizado a nivel internacional, el término competencia digital se utiliza a menudo como sinónimo, especialmente en el contexto europeo (Ferrari, 2012; Krumsvik, 2008). Sin embargo, los dos términos no siempre tienen las mismas connotaciones o el mismo nivel de abstracción según el contexto lingüístico y la perspectiva en la que se implementan (Meyers et al., 2013).
Sobre la base de esta revisión de la literatura, la competencia digital puede considerarse un concepto multifacético que surge de varios orígenes (Ala-Mutka, 2011; Ilomäki, Kantosalo & Lakkala, 2011b; Gallardo-Echenique, 2012; Ferrari, 2012). Está estrechamente relacionado con los enfoques de alfabetización, pero no es idéntico. La competencia digital se considera una competencia central en los documentos de políticas, pero aún no es un concepto estable (Ilomäki, Kantosalo & Lakkala, 2011a; Gallardo-Echenique, 2012). Estas diferentes nociones hacen que aún no existan pautas claras de evaluación de la competencia digital (Ananiadou & Claro, 2009). Mientras que algunos perciben la competencia digital como el uso técnico de las TIC, otros la definen de manera más amplia como aplicación del conocimiento o como habilidades del siglo XXI.
La Sociedad de la Información y el Conocimiento destaca la necesidad de “una ciudadanía educada capaz de acceder, evaluar, organizar, interpretar y difundir información en formatos cada vez más digitales intercambiados sobre tecnologías habilitadoras” (Somerville, Lampert, Dabbour, Harlan & Schader, 2007, p. 9). Es esencial que las personas desarrollen un nuevo sentido de confianza en sí mismas para dominar la tecnología y los servicios digitales. Como educadores e investigadores, nuestros objetivos deben ser alentar a los ciudadanos a desarrollar las habilidades, el conocimiento, los marcos éticos y la confianza en sí mismos que les serán de gran utilidad en el futuro (Jenkins, 2006; Jenkins, Clinton, Purushotma, Robison & Weigel, 2006 ).
Dados estos desafíos, las instituciones y los formuladores de políticas deben establecer sus prioridades educativas actuales para una respuesta eficaz a las necesidades cambiantes de los estudiantes del siglo XXI. La adecuada adquisición de la competencia digital o alfabetización digital, entendida desde la perspectiva holística y emancipadora, es clave para la participación activa y funcional en la sociedad contemporánea. Este desafío, además de la formación digital inicial y continua de los docentes, es solo uno de los temas relevantes que habrá que abordar en futuras investigaciones.
A partir de la lectura, reflexiona:
- ¿Cuáles son las diferencias que encuentras entre competencia digital y alfabetización digital?
- Considerando que el artículo original fue publicado en 2015, ¿consideras que las instituciones y los formuladores de políticas han respondido a los desafíos del siglo XXI de manera eficaz? De ser así, ¿en dónde lo identificas?
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